La nueva propuesta podría beneficiar a millones de inmigrantes, y establecería la creación de una Oficina Nacional de Nuevos Americanos que dependería de la oficina ejecutiva de la Casa Blanca para coordinar los esfuerzos de los Gobiernos Federales, Estatales, y Locales para apoyar los programas de asistencia para inmigrantes a fin de superar barreras del Idioma y la complejidad para encontrar empleo y ayudaría a la naturalización, así como también crear programas de subsidio de servicios legales y asistencia a la inmigración .
El futuro de esta propuesta resulta incierta debido a la composición de las fuerzas políticas en el Congreso de los EEUU y el ambiente electoral que se vive.